07 octubre 2008

Bienvenida, vecina.

Hace ya unos días que estoy viviendo fuera de mi país y algunos de los gajes de la adaptación, me siguen dando por la cabeza. Bien es sabido por todos, que en el lugar al que se vaya, lejos del suyo propio, se va uno a encontrar con un universo diferente y listo para ser descubierto (aquello a lo que llaman diferencias culturales).

Pues bien, no llevaba yo sino, más o menos, una semanita de haber desempacado en este continente, cuando me crucé a la entrada del edificio a una señora ya entrada, muy entrada en años (como tantos otros por aquí) que al verme y aguzando sus ojos, tal vez (como en aquel inmortal cuento) para verme mejor, me dijo: "No te conozco", a lo que yo, haciendo gala de la educación recibida en mi cuna, respondí "Buenas tardes señora, no me conoce porque soy nueva en el edificio".

Acto seguido la, hasta entonces, amable viejecita se acercó más a mí seguramente para verme aún mejor; gesto al que respondí con una sonrisa y le dije "vivo en el 4º 4ª". La señora, ya lo suficientemente cerca de mí y, evidentemente al desconocer mi acento, me preguntó "¿Tú no eres de aquí verdad?", a lo que una vez más con mi amabilidad a flor de piel, respondí "No señora, yo soy colombiana". Luego de uno de esos silencios incómodos, nuevamente, la anciana se dirigió a mí, pero esta vez sólo para musitar "JJJJMMMMM..."

Yo, adelantándome a lo que se me venía encima por causa del color de mi pasaporte abrí la puerta del ascensor y me despedí, (muy amablemente por supuesto) esperando también alguna palabra de despedida de parte de la señora de la cabeza plateada, pero a cambio de un "hasta luego", recibí un frío "pero pagarás ¿no?"...

Veamos ahora la diferencia cultural a la que me referí al principio.

Si esta situación se hubiera presentado en Colombia, muy seguramente la conversación hubiera sido muy cercana a la siguiente.

Viejecita> "No te conozco"

Nueva vecina>"Buenas tardes señora, no me conoce porque soy nueva en el edificio, vivo en tal apartamento".

Viejecita> "Ahhh qué bueno! En donde vivían los Tal (apellido de la familia), un poco raros ellos, pero buenas persnas, eso sí. ¿Hace cuánto que estás aquí?".

Nueva vecina> "Bueno, pues llegué hace más o menos una semana".

Viejecita> "Pues qué bueno mija, bievenida al barrio, yo vivo en tal apartamento, por si se te ofrece cualquier cosita".

Nueva vecina> "Bueno sí señora, muchas gracias. Igualmente, lo que se le ofrezca por aquí"...

Y dependiendo del tiempo de la una y de la otra, la conversación se hubiera alargado hasta el punto en el que la viejecita se asegurara de poner al día a la nueva vecina con todos los detalles que considerara que la última no debería desconocer sobre la vida en el vecindario...

9 comentarios:

Campanula dijo...

Hola, me gusta muchisimo tu blog, hace algunos meses lo encontre por casualidad y suelo entrar a leer lo nuevo.
Mira yo tambien hace poco me instale fuera de mi ciudad (aunque aca en Colombia), y lo mejor es que uno llega y es el extraño, pero todos siempre tratan de acogerte, no me imagino como debe ser de triste siendo de otra manera

Sandel dijo...

Uhmmm, debe ser porque no te has hecho blanquear la piel como las mujeres de la India.
Dile que la vas a entrevistar para el blog. De pronto la "celebridad" la enloquece :-)
En serio creo que los viejitos en España son todavía más racistas.
Buena suerte.

Anónimo dijo...

No, no necesariamente. Dependiendo de la ciudad y estrato de la misma la señora hubiera refunfuñado algo. Eso en el improbable caso en que te hubiera saludado.

Anónimo dijo...

y te seguirá encontrando con casos así, como dicen acá "es lo que hay".

Lo que si hay ue evitar es que ese tipo de cosas te "rayen" aunque a veces sea inevitable.

Respectoa los viejitos, bueno ya lo hablamos, son una plaga por acá y están en todos lados imponiendo su ley cual si fuera el lejano oeste... cuando veas un grupo de más de 3 huyeee. ,-9

Camilo dijo...

Por aca eso es parte del racismo y la xenophobia; la mejor respuesta? Portate como si fueras la reina que viene de visita.

Madeleine dijo...

Hola. Bueno ahí indudablemente la viejecita creo que fue demasiado prejuiciosa. En fin buen relato, ojalá la señora en una próxima oportunidad no se comporte de esa forma tan ridícula.

Nightwriter dijo...

depronto la cuchita se entere algún día que eso en otros países es mala educación, pero como lo mas probable es que no pase, pues haz la actitud europes: miras de reojo y sigues tu camino, as´no volverá a preguntar si vas a pagar o no...

Por cierto, bueno tu blog!
Saludos!

CaRoLuNiTa dijo...

Hola Clau! La verdad es que eso justamente era en lo que yo pensaba. Allí se cuenta con más suerte y no falta quien te tienda una mano. Aquí, también los habrá (no puedo generalizar), pero aún no me he cruzado con muchos.

Hola Sandel! La verdad es que no sé si sea racismo o no, pero realmente espero que no sea así y menos que los más racistas sean los viejitos; de ser así, estamos en la mala, porque aquí sí que abundan las cabezas plateadas.

Hola Patton! Claro tienes razón, no en todas partes es igual y seguro que depende también del estrato, pero al menos hasta el 3, ésa sería la constante; así las cosas estamos hablando de la inmensa mayoría.

Hola Alejo! Es verdad, si me dejo 'rayar', me llevará el que me trajo, eso seguro.

Hola Camilo! No me gusta pensar en que sea racismo o xenofobia, esas son palabras muy fuertes para mi gusto, pero debo confesar que no siempre te sientes como el huésped más esperado del día.

Hola Vicky! Ahora, cada vez que me encuentro a la viejita, a duras penas le sonrío y ella insiste, cada vez que me ve, en decir "no te conozco" jaja!

Hola Nightwriter! Uf! Es muy cierto que ésa es la actitud de la mayoría aquí, pero a decir verdad, no quiero que se me pegue, porque cuando regrese a mi tierra, no quiero parecer tan 'petarda'.

Un abrazo grande para todos

Luisa Tejada dijo...

Hola Carolunita.
Yo soy peruana y vivo en España desde hace año y medio, sé perfectamente cómo se siente la mirada de laboratorio de algunos viejit@s de aquí.
También es cierto que nuestra cultura suele ser acogedora y abierta, somos, por lo general, amables y receptivos. Aquí lleva un tiempo ello, pero una vez que te conocen, te encuentras con personas muy buena onda.
En fin, "donde vayas haz lo que vieras, es parte de la adaptación a una cosmovisión diferente.
Un abrazo, y felicidades por tu blog. Me ha gustado mucho.
Te invito a visitar el mío: Los escritos de Maya.
¡Un abrazo universal!