Yo sé, regáñenme

Ya he recibido varios regaños por msn, por el correo e incluso aquí mismo en los comentarios por tener el chucito abandonado y tienen razón, no hay excusa y tampoco puede inventar una. Debo confesarles que incluso se me ha pasado por la cabeza cerrar el chucito, pero no he sido capaz, he ido varias veces a donde dice cerrar este blog, pero no he hecho click y finalmente termino devolviendo la flecha del navegador.


La razón es la misma de siempre, la que argumentan quienes han decidido cerrar sus espacios y que hoy por hoy comprendo: no he tenido tiempo para nada y la verdad es que cuando lo he tenido, lo he invertido en otras cosas.

Hace no mucho, en diciembre pasado escribía el manual del desempleado destacando las bondades de carecer de un trabajo, pero era, como lo señalé en su momento,más que nada un Manual de autoyuda, porque me estaba enloqueciendo entre tanta mascarilla de pepino y sesiones de 6 horas diarias de t.v. En ese momento sabía que tenía que disfrutar la situación al máximo, porque en algún momento terminaría y así fue (para mi fortuna) y hoy soy una empleada más... bueno más que eso, creo que soy la más empleada de todas, afortunadamente vuelvo y lo repito.

Así pues que tienen toda la razón en regañarme, se reciben por todos los medios, msn, correo, blog, teléfono. Más que como regaños, tomaré esos comentarios como un "la extraño mucho" y sépanlo de antemano que por acá también se les extraña.